Las relaciones de pareja son un espacio complejo, en el que conviven no sólo los eventos acutales que forman parte de la vida de la pareja, sino donde pueden estar también una enorme cantidad de condicionamientos del pasado de
ambas personas: dinámicas inconscientes transmitidas por los entornos familiares y sociales de cada quién, patrones heredados de nuestros padres, temas con parejas anteriores, asuntos pendientes de la infancia
y adolescencia, (¡y eso sin contar herencias intergeneracionales y transgeneracionales transmitidas epigenéticamente!). La mayor parte de nosotros tratamos a los conflictos que surgen en las relaciones de pareja como si
se tratara sólo de lo que sucede hoy. Por eso con mucha frecuencia, los problemas no se resuelven con facilidad.
En ese sentido, trabajar con una prespectiva de complejidad nos da una enorme ventaja frente a otros trabajos terapéutico con parejas.
La intención fundamental del trabajo de pareja es entonces apoyar a la pareja a comprender con claridad y separar los temas del pasado de lo que toca resolver hoy, para poder resolver de forma efectiva lo que sí toca hoy, y
atender de forma efectiva el condicionamiento emocional que trae consigo cada miembro y que tiene que ver con dinámicas anteriores que no han sido resueltas.
Buscamos también apoyar a la pareja para comunicarse de forma efectiva, respetuosa y auténtica, cuidando del vínculo y de sí mismos también para lograr el bienestar máximo posible para ambos miembros de la pareja, y de
la pareja misma.
Por ello en nuestro enfoque se trabaja tanto con la pareja en sesiones conjuntas, como de manera individual con cada miembro. En las sesiones establecemos juntos qué son los temas que resultan para ellos más relevantes
y exploramos las dinámicas relacionales y de comunicación que les están impidiendo lograr sus objetivos. Trabajamos entonces para crear una base más sólida para enfrentar los conflictos y apoyar a la pareja para resolver sus
diferencias y poder no sólo continuar, sino crecer y florecer juntos.
Hay, sin embargo, otros 3 casos:
Cuando una pareja llega con dudas sobre si lo mejor es quedarse juntos o separarse.
En este caso, no consideramos que sea nuestro lugar el determinar si una pareja deba mantenerse junta o no. Consideramos que cada miembro de la pareja tiene derecho a determinar si lo que quiere es conservar la relación y trabajar
para enfrentar las dificultades que encuentren en su camino, o si lo que necesitan es poder disolver la relación de la forma más respetuosa y sana posible. Nuestro compromiso es el de no dejar de lado a ninguno de los miembros
y cuidar del espacio relacional, apoyándolos en construir la mejor relación posible entre ambos, sea ésta como pareja o no.
En caso que la pareja tenga claro que quiere separarse.
El trabajo va en el sentido de crear una base de comunicación sana y de respeto para llevar a cabo el proceso de disolución. Este proceso es siempre complejo y parte importante del trabajo es ayudar a la pareja a procesar el duelo
y el enojo de manera sana a través de la comunicación, la compasión, el respeto y la responsabilidad.
En el caso que haya disparidad entre los miembros de la pareja en cuanto al grado de compromiso con la relación.
Un miembro quiere seguir y el otro no está seguro. Exploramos si es posible o deseable el retomar el vínculo y rescatar la relación, o si más bien lo que es auténtico para la pareja es disolver el vínculo de la manera más
sana posible. Nos tomamos el tiempo que sea necesario para lograr claridad al respecto, pues no suele ser una decisión sencilla. Una vez aclarado esto, procedemos a apoyar a la pareja para lograr el objetivo establecido.
Testimonio :
La situación por la que vine a terapia pasó de ser potencialmente explosiva, emocionalmente peligrosa, destructiva y pesada--a ser mucho más ligera, en el sentido de lograr una mayor comprensión, y menor pesadez [...] la pesadez se movió, hay más risas, humor, y es mucho más amoroso. No éramos ya capaces de manifestar amor. El amor estaba ahí, pero estaba como encerrado adentro. Así que logramos mucho.
Anónimo